martes, 27 de julio de 2010

Pelea

Estoy frente a mi adversario. Los dos nos miramos con cuidado, examinamos nuestros puntos débiles, hacemos gestos de amenaza o tratamos de confundirnos el uno al otro con movimientos de súbito miedo. Sé que va a ser una pelea difícil y dolorosa. Él también lo sabe. Por fin, me decido yo primero y doy un salto sobre él con la mano extendida. El espejo se rompe.

6 comentarios:

  1. (Yo a este tío lo conozco de algún lado...)

    Muy bueno.

    PD: Por cierto dejé un comnetario en la entrada anterior pero no salió por lo que veo.

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  2. Hermoso e impactante micorrelato. Me ha gustado muchísimo.
    Un abrazo.

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  3. Qué vacaciones más breves.

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  4. Tienes que perdonarme, Juan Ignacio, y todos los que han estado haciendo comentarios, tan amables, estos días. Ahora estoy en un lugar tan alejado del mundo (o no tanto, pero es un rincón de Galicia) que no tiene conexión de internet. Por eso mi tardanza en mostrar los comentarios. Perdón.

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  5. Es que a veces uno no puede parar, Fernando.

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  6. Gracias, opinador. Veo que compartimos calor y cervezas en estos días pasados...

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