Mañana, casi todo el día, será martes. O también miércoles. Es igual. Yo confundo los días. Ayer fue jueves y hoy es lunes. Llevo tanto tiempo encerrado que sólo espero al Domingo para que alguien me saque de aquí.
Bueno, en cierta forma, toda la literatura es una adivinanza cuya respuesta tiene que buscar cada lector, al menos eso creo. Y toda explicación racional(más aún si es del autor) rompe la magia. Pero, en fin, si sirve de algo lo que puedo decir, aquí traté de imaginar el estado de alguien que ya está fuera del tiempo humano, porque se encuentra en el Purgatorio. De ahí la confusión de los días de la semana. La mención del Domingo final, teniendo en cuenta esta explicación, ya me parece muy obvia. El Purgatorio nunca es para siempre, aunque esto también es una mala explicación porque recurro a tiempos verbales para expresar una realidad supratemporal. Un saludo.
Me hacía yo que cuando decías que llevabas "mucho tiempo en esta caja" estabas hablando de la computadora (por el monitor, ¿vio?, la TV, la caja boba...).
Me ha gustado. Yo pensé que el Purgatorio era la semana que finaliza en un fantástico Domingo, cuando podemos ir a Misa y desacernos por unos momentos de tanta atadura material.
Prueba a eliminar "en esta caja". Creo que el relato gana si también te "desubicas" en el espacio, ya que se centra más en el tiempo (a-temporal o anti-temporal), y no relacionas el Purgatorio con una caja. ¿Es que eres una cerilla, un par de zapatos, Tomás con su lápiz mágico (es un cuento infantil), o como dice Juan Ignacio, la TV, el monitor...?
Aunque menos importante, ¿ese "alguien", no podría/debería llevar la inicial en mayúscula?
¿Es una adivinanza?
ResponderEliminarBueno, en cierta forma, toda la literatura es una adivinanza cuya respuesta tiene que buscar cada lector, al menos eso creo. Y toda explicación racional(más aún si es del autor) rompe la magia. Pero, en fin, si sirve de algo lo que puedo decir, aquí traté de imaginar el estado de alguien que ya está fuera del tiempo humano, porque se encuentra en el Purgatorio. De ahí la confusión de los días de la semana. La mención del Domingo final, teniendo en cuenta esta explicación, ya me parece muy obvia. El Purgatorio nunca es para siempre, aunque esto también es una mala explicación porque recurro a tiempos verbales para expresar una realidad supratemporal. Un saludo.
ResponderEliminarMe hacía yo que cuando decías que llevabas "mucho tiempo en esta caja" estabas hablando de la computadora (por el monitor, ¿vio?, la TV, la caja boba...).
ResponderEliminarYo creo que el título es suficientemente explicativo como para dar más orientaciones. Me ha gustado, Javier. Un abazo.
ResponderEliminarHola, Javier.
ResponderEliminarLa explicación romperá la magia, pero para mí, en este caso, era imprescindible, así que muchas gracias.
Me ha gustado. Yo pensé que el Purgatorio era la semana que finaliza en un fantástico Domingo, cuando podemos ir a Misa y desacernos por unos momentos de tanta atadura material.
ResponderEliminar¿Me permites una sugerencia/comentario?
ResponderEliminarPrueba a eliminar "en esta caja". Creo que el relato gana si también te "desubicas" en el espacio, ya que se centra más en el tiempo (a-temporal o anti-temporal), y no relacionas el Purgatorio con una caja. ¿Es que eres una cerilla, un par de zapatos, Tomás con su lápiz mágico (es un cuento infantil), o como dice Juan Ignacio, la TV, el monitor...?
Aunque menos importante, ¿ese "alguien", no podría/debería llevar la inicial en mayúscula?
Gracias, Álvaro: lo he conversado con la almohada y ella me ha dicho que tenías razón. Tiraré la caja.
ResponderEliminar¿en serio? Vaya, me halaga. Espero que no sea por compromiso...
ResponderEliminar